En la fría madrugada del 08 de julio del 2010, se originó la mayor tragedia en la historia del sistema carcelario de nuestro país.
Doce reclusos fallecieron calcinados en su celda, estuvieron varios minutos pidiendo que se abriera la celda, pero no recibieron respuesta. Nueve de ellos fueron encontrados en el baño de la celda, de un metro por un metro.
«Abre loco, abre que nos prendemos fuego, por favor abrí, abrí y pasanos para este lado», se escuchaba en un video filmado por reclusos que estaban en una celda de enfrente. El llavero no respondió pero los reclusos lo vieron dudar en el pasillo.
Cuando abrieron la celda -que tiene espacio para ocho y había 20 personas recluidas- los Bomberos apagaron el fuego que prácticamente había tomado toda la celda.
Ocho personas lograron salir, tres murieron en la celda de unos diez metros por cinco y nueve fueron encontrados calcinados abrazados entre sí en el baño de la celda, una pieza de un metro por un metro.
«Llavero vamos a morir», había advertido uno de los reclusos cuyo aviso quedó registrado en el video que fuera analizado por la Justicia.
Según la Dirección Nacional de Bomberos, el fuego comenzó a las 3.43 hrs.
La tragedia
Trabajaron en el lugar dos dotaciones de Bomberos del departamento de Rocha. 12 internos murieron calcinados y ocho resultaron heridos con quemaduras de diferente entidad. Los lesionados fueron derivados a diferentes centros hospitalarios de Rocha, Maldonado y Montevideo.
Según versiones periodísticas de la época, el siniestro se habría producido a raíz de un cortocircuito que produjo uno de los calentadores caseros que utilizaban los presos para calentarse durante el invierno.
En la cárcel vivían 121 reclusos (el doble de lo que debería tener), 20 de los cuales se encontraban en el sector en que se originó el incendio.
Las víctimas
El Ministerio del Interior remitió en aquel momento un listado de reclusos internados y fallecidos en el incendio del Centro de Reclusión de Rocha.
FALLECIDOS
- José María PEREIRA PEREIRA
- Raúl Alejandro GOMEZ RECALDE
- Delio ALEGRE
- Matías BARRIOS SOSA
- Mario Fernando MARTINEZ MAIDANA
- Edinson Javier NÚÑEZ CASURIAGA
- Ariel Fernando CARDOSO VELÁZQUEZ
- Jorge Luis RODA ACOSTA
- Antonio Joaquín CARDOZO SILVERA
- Julio César DA SILVA PEREIRA
- Luis Alfredo BUSTELO LOPEZ
- Alejandro Adolfo RODRÍGUEZ CABRAL
INTERNADOS
Alberto Devanir RODAS GONZÁLEZ
Trasladado al Hospital de Maldonado
Adolfo Eduardo MEDEROS SCANTONI
Trasladado a Hospital de Montevideo
Paulo Roberto COSTA PEREYRA
Hospital de Rocha
Ruben Darío DAMESTOY CARDOZO
Trasladado al Hospital de Montevideo
Fernando Daniel MENDEZ RODRÍGUEZ
Trasladado a Hospital de Montevideo
Henri Fabricio LALUZ FERNÁNDEZ
Trasladado al Hospital de Rocha
Luis Alberto ACOSTA PEREZ
Trasladado al Hospital de Rocha
Pablo Andrés CHAPORE SAN MARTÍN
Trasladado al Hospital de Rocha
No se encontraron responsabilidades penales, los familiares continúan reclamando justicia.
“Cada 8 de julio es como volver a enterrar a nuestros hijos”, expresó Mario Barrios, padre de uno de los jóvenes fallecidos en el incendio. Esto sucedió el año pasado, cuándo se cumplieron 10 años de la tragedia. Fue la primera vez los familiares ingresaron a la cárcel. El lugar está intacto como cuando se abandonó luego del incendio.
En 2016, la magistrada Marcela López, quien archivó el caso, señaló en su fallo que “no puede perderse de vista que el incendio mismo ha sido causado por un caso fortuito (caída de una sábana o manta de uno de los reclusos de la celda sobre un calefactor); ni por el Estado ni sus agentes”. El hecho sucedió cuando uno de los 20 presos que se encontraban en una celda de siete metros de largo por tres de ancho, se movió de su cama dejando caer, sin buscarlo, una sábana sobre un precario calefactor que habían fabricado los propios reclusos para poder calentarse.
